Es una “Joyá” del Cirque du Soleil

El espectáculo “Joyá” fascinó al público que esta noche asistió a su premier mundial en el primer teatro del Cirque du Soleil que se construye en México, en la Riviera Maya, Quintana Roo.

Unas 600 personas aplaudieron el trabajo en escena de 24 artistas y seis músicos provenientes de varios países, quienes durante una hora 10 minutos, los hicieron vivir una experiencia única llena de fantasía, color, música y canto.

Inspirado en el viaje migratorio de la mariposa monarca, el “show” desarrollado en un acto, narra la historia de un viejo alquimista y su nieta de 15 años, quienes a partir de que encuentran una piedra preciosa llamada Joyá en un místico manglar, realizan una gran travesía para descubrir los secretos de la vida.

Frente a ellos se les revelará un mundo habitado por personajes fascinantes que trabajan en conjunto para inmortalizar el amor a la vida. Son mitad humanos y mitad animales, que buscan transmitir la poesía, la alegría, la valentía y la amistad a las futuras generaciones.

Con coreografía estupenda, un malabarista domina siete pelotas en el aire, mientras que dos paracaidistas sorprenden con actos de equilibrio, humor y giros triples mortales.

En perfecta sincronía y concentración lucen dos mujeres trapecistas, para luego ceder el escenario a dos artistas en duelo de “espadas”.

Un buzo, peces bailando, una medusa marina y la agilidad de una contorsionista sobre la mesa de los comensales, son algunos de los números circenses que ilustran el espectáculo.

La escenografía describe el interior de una cabaña en medio de la selva, que alberga un gran laboratorio con infinidad de libros.

Una hora antes del espectáculo, algunos de los invitados degustaron de una cena gourmet de tres tiempos preparada por el Culinary Designer de Grupo Vidanta, Alexis Bostelmann.

Se compuso de gastronomía internacional y está incluida en el paquete VIP a la compra del boleto, así como champaña Premium, proveniente de Épernay, región al norte de Francia.

Con una inversión de 30 millones de dólares, el Teatro Cirque du Soleil en The Grand Mayan Resort de Riviera Maya se construyó durante un año y medio. El espectáculo está inspirado en elementos culturales y tradicionales de México.

A través de un gran mural que se muestra al finalizar la función, se hace referencia a la Universidad Nacional Autónoma de México, al Museo de Antropología e Historia y se muestran las imágenes de los antepasados, calaveras tocando la guitarra y de los pintores Frida Kahlo y Diego Rivera.

El teatro está construido sobre una superficie de 5 mil 260 metros cuadrados de extensión y simula a una palmera naciente de la tierra en medio de la jungla.

Tiene una capacidad para 600 personas. Es el más pequeño e íntimo de todos los foros que hay en el mundo. Su última fila equivale a la línea 10 de uno de los teatros en Las Vegas, Nevada, con capacidad para unas 2 mil personas.

De acuerdo con Karen Collado, encargada de relaciones públicas de “Joyá”, es la primera vez que Cirque du Soleil tiene un “show” permanente fuera de Estados Unidos, pues anteriormente se podía hallar sólo en Las Vegas, Nevada, y Orlando, Florida.

En él participan dos mexicanos, la actriz Diana González y un baterista, así como otros artistas provenientes de Canadá, Estados Unidos, Europa y Asia.

El costo de los boletos oscila entre los 65 y 225 dólares.

Por la alfombra roja desfilaron famosos como el cantante Joe Jonas del grupo Jonas Brothers, la ex Miss Universo Ximena Navarrete, la actriz Ashley Greene, la conductora Louise Roe y el actor Alan Estrada.

También llegaron el grupo Vázquez Sound, los actores Jessica Szohr, Adrian Grenier y Karla Díaz, así como algunos de los artistas y equipo creativo del show.