30 de agosto: Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas

Cada año, el 30 de agosto se conmemora el Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas con el objetivo de honrar la memoria de las personas que se encuentran desaparecidas, además de visibilizar la importancia de los casos que se presentan en todo el mundo y reconocer el derecho de las víctimas y sus familiares a la justicia.

El Día Internacional de las víctimas de desapariciones forzadas fue establecido por la preocupación generada por el aumento constante de los casos de las desapariciones forzadas o involuntarias alrededor del mundo.

La resolución fue aprobada por la Asamblea General de la ONU el 21 de diciembre del 2010.

De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la desaparición forzada se define como la privación de la libertad de una persona por medio de su arresto, detención o traslado en contra de su voluntad.

De esta forma, las personas desaparecidas son arrebatadas de la protección que les brinda la ley. Este acto puede ser ejecutado por agentes gubernamentales, grupos organizados o particulares.

En México, la desaparición forzada persiste y aumenta,  lo que preocupa a la población en general, que cada vez se siente más vulnerable.

De acuerdo con el Informe Nacional de Personas desaparecidas 2024, divulgado por el Instituto Mexicano de Derechos Humanos y Democracia, hasta mayo del 2024 se registraron 100 mil casos de personas desaparecidas en el país.

Esto representa una alza del 6.3% de los casos registrados en el 2023 que, a su vez, aumentaron 7.3% respecto al 2022.

De las cifras registradas al comienzo del siglo hasta el presente año, la desaparición forzada ha incrementado un 88%.

El año en que hubo el mayor número de personas desaparecidas fue el 2023, con 10 mil 315 casos. El organismo apunta que, de seguir las cifras del 2024 como van hasta el momento, este año se podrían superar los casos presentados en el 2023.

La desaparición forzada de personas no afecta únicamente a las víctimas directas y a sus familias, la comunidad también es perjudicada, pues se genera una constante sensación de inseguridad.

Esta conmemoración pone sobre la mesa la urgencia de acciones que prevengan el aumento de los desaparecidos, además de multiplicar los esfuerzos para localizar a las víctimas y aplicar sanciones a los responsables.