Albergues para menores, siniestros mortíferos

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Publicado: 13 de March, 2017 | 11:36 AM

Albergues para menores, siniestros mortíferos

Guatemala, 12 de marzo de 2017, asciende a 40 el número de jóvenes muertas, luego del incendio en el centro de refugio Hogar Seguro Virgen de la Asunción, el pasado miércoles. 

De acuerdo a los primeros reportes, el fuego fue inducido un día anterior al desatarse una revuelta en al que al menos 60 internas se fugaron del centro que daba refugio a más de 700 menores víctimas de violencia, pese a que su capacidad era para 400 personas. 

Para organismos de Derechos Humanos, el centro de acogida administrado por el gobierno guatemalteco, no contaba con las medidas se seguridad necesarias y las internas se quejaban por la mala calidad del servicio y de los abusos sexuales y físicos, por lo que desde 2015 solicitaron su revisión. 

Ante la tragedia en el inmueble que también funcionaba como cárcel para jóvenes infractores, el Gobierno de Guatemala decretó tres días de luto nacional, la Fiscalía abrió una investigación para deslindar responsabilidades y la ONU lamentó los hechos, además este sábado, centenares de personas salieron a las calles para exigir justicia y la renuncia del presidente guatemalteco, Jimmy Morales, quien confirmó que cuatro de las víctimas fueron trasladadas a  Galvestón, Texas para su atención. 

El incendio  en Guatemala, no es el único que ha ocurrido en un albergue para menores, pero sin duda, es el más mortífero registrado hasta ahora. 

En diciembre de 1998, 24 niños murieron en un incendio que se produjo en un orfanato de Filipinas, luego de escucharse una explosión en la madrugada, por lo que todos los se encontraban dormidos. 

Para febrero de 2010, una conflagración  devastó el hospicio denominado Casa Esperanza de Cristo, ubicado en Sudáfrica, lo que provocó la muerte de 11 internos, entre ellos varios bebes. 

Un año después, en febrero de 2011, al menos 10 menores perdieron la vida en un siniestro similar que se desató en un inmueble que daba refugio a niños con discapacidad en Estonia; las autoridades no pudieron determinar las causas del siniestro. 

En enero de 2013, fue en China donde las llamas cobraron la vida de siete pequeños que vivían en una casa hogar privada en la que se encontraban niños rescatados de la calle. 

Para julio de 2016, la tragedia regresó a Sudáfrica, ya que ocho jóvenes murieron calcinados en un centro de atención para menores desamparados.

UANE