"Es ilicito": Ecuador sobre asilo de México a ex vicepresidente

A través de un comunicado en la plataforma X, la cancillería de Ecuador calificó como un acto ilícito el asilo político otorgado a Jorge David Glass Espinel, ex vicepresidente de Ecuador, debido a que es requerido por presunta malversación por lo que las convenciones internacionales dictan que esa acción no aplica. 

El comunicado afirma que el gobierno mexicano tiene la obligación de entregar Alex funcionario para que sea puesto a disposición de los tribunales de justicia de Ecuador.

El gobierno ecuatoriano lamento que México no haya considerado las obligaciones expuestas en acuerdos internacionales para combatir la corrupción de funcionarios públicos. Además , reitero que no se otorgará el salvoconducto para que Glas salga del pais. 

“El gobierno del Ecuador lamenta que México no haya considerado en su decisión, además de las mencionadas convenciones sobre asilo diplomático, las obligaciones contenidas en la Convención de las Naciones Unidas contra la Corrupción de 2002 y en la Convención Interamericana contra la Corrupción de 1996, haciendo efectivo el deber de cooperar para prevenir y combatir los actos de corrupción en el ejercicio de las funciones públicas. 

Para el Ecuador resulta jurídicamente evidente que no es lícita la concesión de asilo diplomático del señor Jorge Glas Espinel. En consecuencia el Ecuador reitera que no otorgará salvoconducto alguno, ya que no procede en el marco de las referidas convenciones.”

Aunque, la cancillería mexicana aseguró que según una convención de 1954, el Estado aislante es el único facultado para calificar la naturaleza de la persecución política por lo que de ser solicitada el permiso de salida por parte de México, Ecuador está obligado a expedirlo. 

El ex funcionario está refugiado desde el pasado 17 de diciembre en la embajada de México en Ecuador, evitando una orden de captura. 

Sin embargo, el anuncio del asilo tuvo lugar luego de qué se declarara como “persona non grata” a Raquel Serur, embajadora mexicana en Ecuador, y se ordenará su salida del país pronto, por lo que sera evacuada en un avión militar mexicano y la embajada quedará a cargo de una delegación. 

Aunque se ha descartado romper relaciones, el asilo abre un nuevo frente de conflicto entre ambos países