EU deporta a 8 migrantes, incluyendo un mexicano, a Sudán del Sur; los acusan de cometer “crímenes monstruosos”

El gobierno de Estados Unidos deportó a ocho migrantes, entre ellos un ciudadano mexicano, a Sudán del Sur, un país en conflicto armado.

Según el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), los migrantes fueron expulsados porque “ningún país en el mundo quería aceptarlos debido a la monstruosidad de sus crímenes”.

Los deportados son Jesús Muñoz Gutiérrez de México, Enrique Arias Hierro y José Manuel Rodríguez de Cuba, Thongxay Nilakout de Laos, Kyaw Mya y Nyo Myint de Birmania, Tuan Thanh Phan de Vietnam y Dian Peter Domach de Sudán del Sur.

Los migrantes deportados están condenados por delitos que van desde asesinato hasta abuso sexual infantil. Jesús Muñoz Gutiérrez, un ciudadano mexicano que fue arrestado por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), enfrenta una cadena perpetua por asesinato en segundo grado.

Ante esto, organizaciones de derechos humanos han denunciado que los migrantes no tuvieron oportunidad de objetar la deportación ni de contactar a sus abogados antes de ser enviados a Sudán del Sur.

Inclusive un juez federal de Massachusetts ordenó al gobierno garantizar que los deportados puedan regresar a EU si se determina que la expulsión fue ilegal.

La medida ha generado controversia debido a la gravedad de los delitos atribuidos a los deportados y las condiciones del destino. Por ello, la comunidad internacional sigue de cerca el desarrollo de este caso, mientras expertos legales advierten sobre posibles implicaciones constitucionales en la política migratoria estadounidense.