Largas filas en supermercados incrementa el riesgo de contagios

Aunque el Gobierno Estatal determinó que el cierre de supermercados y tiendas de autoservicio como Oxxo y Seven Eleven funcionaría como estrategia para contener los contagios de COVID-19, las largas filas y aglomeraciones provocadas por las compras de pánico, lejos de ayudar al objetivo han incrementado el riesgo de transmisión en los municipios en que se indicó.

Esto pude evidenciarse en los centros comerciales de Reynosa en donde las largas filas en las cajas y gran número de personas en los pasillos, complicaba el mantener la sana distancia, además de apreciarse filas de familiares que esperaban a las afueras de los establecimientos.

La molestia de los habitantes por la decisión tomada por las autoridades de salud también quedo de manifiesto en redes sociales, donde los usuarios se quejaban puesto que muchos trabajan de lunes a viernes o hasta sábado y únicamente pueden surtir su mandado en fines de semana, además de que los pagos en maquiladoras se dan de manera semanal hasta el jueves o viernes.

La medida fue anunciada este martes por la Secretaria de Salud, Gloria Molina Gamboa quien señaló que debido al incremento en el número de casos positivos y defunciones, se decretaba que 8 municipios, entre los que destaca Reynosa por ser el de mayor positividad con mil 627 positivos y 155 defunciones, se mantenían en fase de alto riesgo.

El cierre de estos negocios se suman a que el transporte público no opere en fines de semana y mantenga horarios únicamente de 6 a 9 de la mañana y de 3 de la tarde a 9 de la noche.

Además de las restricciones en movilidad que prohíben transitar de 10 de la noche a 5 de la mañana a menos que sea por algo esencial.