Leyes laxas permiten usar constructoras para lavar dinero: CMIC

El presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) Reynosa, Roberto Salinas Ferrer, declaró que la laxitud con la que la ley vigila la celebración de contratos entre  instancias de Gobierno y empresas constructoras es la que ha dado pie a que casos de lavado de dinero como el del ex gobernador, Eugenio Hernández Flores, sean posibles.

Señaló que con base en estas lagunas jurídicas es que, tanto en Tamaulipas como en otras entidades del país e incluso al interior del Gobierno Federal, se beneficien a constructoras creadas ipso facto que coinciden oportunamente con el inicio de las administraciones, siendo al final del día empresas fantasmas que fungen como prestanombres para estos traslados ilegales de capital público.

“Venimos peleando eso, en cada época van creándose constructoras nuevas que no tiene capacidad técnica o económica, de reciente creación a las que hay que ponerle el ojo porque por ahí es un área que se aprovecha para esos malos manejos. En la CMIC tenemos un código de ética y un código de conducta y el que se salga o vaya por otro camino tiene que ser investigado y sancionado. Estamos a favor de la ley y el orden”.

En este sentido, Salinas Ferrer enfatizó que la postura que mantiene la Cámara respecto al tema es que, sin importar quienes resulten responsables de este tipo de operaciones se les debe seguir un proceso judicial ya que estas acciones, además de ser contra la ley, afectan a la ciudadanía y los profesionales de la construcción que llevan su ejercicio en apego a los valores y preparación necesaria.

“Lo que pide la CMIC es que en el área que sea que vivamos un estado de derecho y que quien cometa cualquier delito tiene que ser investigado y perseguido”.