Migrantes optan por aislamiento voluntario para evitar contagios

Como parte de las medidas de prevención ante contagios de COVID-19, el albergue para migrantes extranjeros, Senda de Vida, el cual se encuentra saturado actualmente, ha cerrado sus puertas y los residentes han optado por el aislamiento voluntario.

"La gente que está aquí, todos están de acuerdo en no salir, todos están conscientes tambien de que nadie entre", expresó el director del albergue, Héctor Silva de Luna, ya que únicamente se permite el acceso a proveedores y las salidas están limitadas a la compra de víveres.

Respecto a los recién llegados, únicamente se les apoya con el registro para agendar sus citas una vez reactivadas las operaciones de los consulados estadounidenses en México, "no se les está llamando, ¿Para qué voy a abrir la puerta si Estados Unidos está a punto de cerrar?".

Dicha suspensión de trámites provocó que el albergue se saturara, y al momento hay cerca de 350 migrantes, que incluso han acampado en tiendas debido a la falta de espacio.

Para descartar la presencia del virus entre los pobladores, médicos pertenecientes a organizaciones civiles y gubernamentales realizaron revisiones y descartaron contagios, mientras que en el interior del albergue se reforzaron las acciones de limpieza y medidas de prevención.