Stealthing, una agresión sexual disfrazada de moda

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Publicado: 09 de November, 2018 | 4:18 PM

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El Stealthing se ha convertido en una práctica sexual de “moda”, por así decirlo, entre las parejas que mantienen relaciones sexuales, la cual más que una tendencia, por la popularidad que ha generado, es considerada tal cual, un abuso para quienes son sometidas, sin consentimiento alguno, a dicha práctica.

El hecho de que el stealthing haya tomado fuerza entre las prácticas más comunes entre jóvenes, llegando a denominarse incluso como una “tendencia” o “moda”, como ya se mencionó, no significa como tal que deba realizarse, pues hay que destacar que la línea entre estas prácticas, que suelen tomar popularidad rápidamente, y la de las agresiones o abusos, es delgada, y sin imaginarlo o inclusive pensarlo, llega a borrarse con facilidad, pues se considera que no hay un acto incorrecto o delictivo.

Stealthing, es el término que en inglés significa “en sigilo” o “secretamente”, se usa para describir la acción del hombre de quitarse el condón durante el acto de las relaciones sexuales, a pesar de no haber sido acordado con la pareja,

Una práctica sexual peligrosa que se ha puesto de “moda”, pues se pone en riesgo la salud, con enfermedades de transmisión sexual y embarazos no deseados. Atenta además contra los derechos sexuales de las mujeres quienes son sometidas a una práctica que está fuera de los términos que ellas aceptan.

 

¿MODA O DELITO?

Esta preocupante acción la comenzaron a realizar hombres, quienes con el fin de demostrar haber logrado con éxito quitarse el preservativo o en su caso mostrar paso a paso como hacerlo, comenzaron a subir videos, tutoriales en internet que en cuestión de días se hicieron virales.

El principal argumento de la mayoría era el “derecho a difundir su semilla” por el mundo, y no solo eso, pues consideran que si una mujer se queda embarazada, es en definitiva porque “lo merece”.

La autora principal del estudio “Violación Adyacente”: Imaginando Respuestas Legales a la Eliminación No Consensual de Condones” publicado en el “Columbia Journal of Gender and Law”, Alexandra Brodsky, cita a Mark Bentson, un hombre que publica constantemente en internet, en diferentes sitios dedicados al stealthing, información sobre cómo lograr de forma exitosa esta “novedosa y exquisita práctica”, como el describe.

Habla también sobre los foros de ayuda mutua en donde los consejos para continuar con estos actos abundan. Relata un ejemplo en donde un hombre se queja de que su novia quiere tener relaciones solo con preservativo, y algunos ante ello, le contestan: “Amenázala y dile que se tome la píldora”.

Otro de los consejos habla sobre cómo hacer que los condones sean más frágiles para que se rompan durante el acto.

Para Katie Russell, de la ONG Rape Crisis (Crisis de Violación), es preocupante que incluso se le pongan nombres como éste a cosas que efectivamente son sólo otra forma de asalto sexual, pues se trivializa el tema es cuestión, considerando  que, “si alguien da su consentimiento a un acto sexual específico con el uso de anticonceptivo y tú cambias los términos de ese acuerdo en medio del acto, eso es una ofensa sexual".

"Es un término muy aceptable para algo que es extremadamente inaceptable y que de hecho es un acto de violencia sexual".

Coincidiendo con ello, defensores de los derechos sexuales, consideran que debe ser tratado como una violación, además de recalcar que queda nulo el derecho a la toma de decisiones reproductivas, libres y responsables, en el cual se deja muy en claro el libre uso y el derecho pleno a los métodos de regulación de la fecundidad.

 

MOTIVACIONES

Expertos dicen que una de las principales razones por la cual se realiza esto, es el argumento de no sentir lo mismo al tener relaciones sexuales si utilizan condón, pues si no lo usan, incrementa el placer sexual, inclusive, algunos lo toman como un reto, es decir, lograrlo sin que la mujer note la ausencia del condón.

Hay que recalcar que muchos de los casos no son denunciados, porque quienes pasan por ello, ignoran que se trata de un peligro que atenta contra la integridad o bien, consideran que al haber aceptado tener relaciones, esa práctica en cuestión también está implícitamente consentida, lo cual no es así.

 

PAÍSES DONDE YA SE CASTIGA

En España esta práctica es considerada un abuso sexual, por lo tanto, su práctica es ilegal, de acuerdo con la Ley Orgánica 10/1995, de 23 de noviembre, del Código Penal. La pena en ese país va  de 6 meses hasta los 4 años de prisión.

Dicha pena establece que quien sin consentimiento realice actos que atenten contra la libertad o indemnidad sexual, será considerado responsable de abuso sexual, lo cual cumple con las características del stealthing.

En Suiza y Argentina, ya se han presentado denuncias por stealthing y ya se busca la modificación en esos países para las leyes y que de esta forma se reconozca como una práctica abusiva hacia la mujer.

En Suiza, un hombre de 47 años fue condenado a un año de prisión en suspenso por “violación” a una mujer que había conocido en Tinder, pues alegó, que si hubiese sabido que él iba a sacarse el preservativo, se habría negado a tener relaciones sexuales. Por su parte en Argentina  en lo que va del 2017 se registraron tres casos de los 400 delitos contra la integridad sexual denunciados este año.

 

Si fuiste víctima de esto, no importa si la persona que te lo hizo es tu pareja estable u ocasional, no debes ignorarlo, pues hay que tener en cuenta que la salud está en riesgo, por lo que es recomendable en estos caso acudir a un ginecólogo lo más rápido posible y realizarte pruebas para detectar ITS/ETS, y en su respectivo caso, informarte de qué forma se puede proceder para que esto no vuelva a pasar.

UANE